Ciudad De México a 30 de enero de 2017.-Es para la secretaria General Carolina Monroy y para mí, un verdadero honor estar esta mañana aquí con ustedes, para inaugurar los trabajos de su Décima Reunión Plenaria.
Es especialmente importante reconocer que en el contexto del Aniversario 100 de nuestra Constitución, esta Legislatura se ha caracterizado y distinguido por ser una de las más productivas en la historia de nuestro país.
Y no sólo por el número de transformaciones constitucionales que se han discutido ampliamente y aprobado, sino por la profundidad que han tenido éstas para el desarrollo presente y futuro de nuestro país.
Ciertamente vivimos momentos históricos. Los retos que impone el contexto internacional a nuestro país, demandan soluciones al interior de nuestro país, demandan el mayor sentido patriota de las senadoras y los senadores de la República.
Los intereses de México son primero, los intereses del pueblo mexicano son primero, y hemos escuchado en el contexto de la nueva relación bilateral con los Estados Unidos de Norteamérica que su gobierno afirma que los intereses del pueblo norteamericano serán primero.
Ambos pronunciamientos perfectamente entendibles en un contexto democrático, donde los intereses del pueblo mexicano serán primero para su gobierno, y los intereses del pueblo norteamericano serán primero para su nuevo gobierno.
Pero por esa razón, porque los intereses de los pueblos van primero, es responsabilidad de ambos gobiernos encontrar condiciones ganar-ganar, donde para defender los intereses del pueblo se buscan coincidencias en diversas áreas de política pública, de política internacional, para fortalecer la vida económica, social y cultural de ambos pueblos vecinos.
Ese es el contexto y ese es el reto que tenemos enfrente de nosotros, y este Senado de la República tiene la altísima responsabilidad de participar activamente en la diplomacia de nuestro país, en la diplomacia parlamentaria.
Que quede claro: no pagaremos un solo ladrillo de un absurdo muro. Pero la relación con los Estados Unidos va mucho más allá del tema del muro.
La relación con el mundo va mucho más allá de la relación con los Estados Unidos y por esa razón este momento histórico nos reclama la mayor participación propositiva a favor de los intereses de nuestro país, para lograr –en la mesa del diálogo y de la diplomacia– acuerdos que nos permitan establecer mejores condiciones para los mexicanos que viven en el exterior, no sólo en los Estados Unidos;
para los mexicanos que tienen inversiones en el mundo entero, incluyendo los Estados Unidos; para aquellos mexicanos que han buscado mejores condiciones de desarrollo profesional y personal en el mundo entero, incluyendo los Estados Unidos.
Para aquellas inversiones del exterior que generan empleos bien remunerados y socialmente justos en nuestro país.
Para fomentar el cuidado al medio ambiente a lo largo de una frontera común y lograr el desarrollo amplio de pueblos vecinos, entre dos países que han demostrado a lo largo de su historia que pueden trabajar juntos.
Y permítanme recordarle algo a los partidos políticos de oposición: México reclama hoy, más que nunca, un alto sentido patriota de unidad, donde pongamos a un lado las diferencias que nos distinguen, pero pongamos en la mesa del diálogo abierto y patriota aquellos principios fundamentales que nos unen como mexicanos.
Porque los retos de la magnitud que enfrentamos en el ámbito internacional se enfrentan de mejor manera unidos y, por eso, los priistas convocamos a un gran Acuerdo Nacional que una las mejores voluntades de los distintos sectores de la sociedad y de los partidos políticos, para hacer un frente común propositivo en este gran momento de la historia nacional.
Habrá que poner un ejemplo: la Operación Monarca, donde participan muchos de ustedes, la senadora Marcela Guerra, el senador Jesús Casillas, el senador José Olvera y muchos más –Blanca Alcalá, de Puebla– donde necesitamos las mejores ideas en el concierto de distintos partidos políticos, donde pongamos el interés de México primero.
Aquí el equipo se llama México y vamos a defender juntos las mejores causas de nuestro país.
Un escenario similar ocurrió en México hace más de dos décadas. Recordarán ustedes que nuestro partido impulsaba una nueva relación comercial con Canadá y los Estados Unidos, precisamente para dejar atrás una etapa de proteccionismo comercial y buscar nuevas oportunidades a través de un Tratado de Libre Comercio.
Las discusiones fueron amplias y, entonces, el Senado de la República también participó activamente en ellas.
En aquel entonces los legisladores de izquierda decían que no era conveniente firmar un Tratado de Libre Comercio con Canadá y los Estados Unidos. Criticaban que dicha política fuera entreguista. Legisladores de derecha sostenían que la negociación iba a ser desventajosa para los intereses de nuestro país.
Dos décadas después, la historia nos ha dado la razón: el Tratado de Libre Comercio ha arrojado múltiples oportunidades de desarrollo económico, social y cultural en ambos lados de la frontera, y para el beneficio de los dos pueblos.
Y ahora que es necesario revisarlo y modernizarlo, aquellos de la izquierda que se oponían a su negociación y acuerdo, demandan que lo protejamos, que lo mantengamos, que lo modernicemos y que continúe. El tiempo nos dio la razón.
Y aquellos que señalaban que el Tratado no había sido negociado teniendo los más altos intereses del país en consideración, hoy escuchan desde el otro lado de la frontera que precisamente ese Tratado de Libre Comercio –negociado por una administración priista– logró los objetivos de crear desarrollo económico para México.
En consecuencia, compañeras y compañeros, reconociendo el trabajo de generaciones de priistas, en este momento de nueva cuenta seremos generosos e incluyentes: con las puertas abiertas siempre recibiremos las mejores propuestas e ideas sin importar quién las presente, pero poniendo el interés nacional por delante, porque México es primero y los intereses de los mexicanos son primero.
En segundo lugar, quisiera hacer un comentario sobre el reto que tenemos en este año en el contexto de las elecciones que se llevarán a cabo en los estados de Veracruz, Estado de México, Coahuila y Nayarit.
El escenario hacia adelante señala los siguientes hechos: hace seis años el PRI en el Estado de México conformó –con distintos partidos con los que tenemos coincidencias y propuestas comunes– una coalición que incluyó al Partido Nueva Alianza, al Partido Verde Ecologista y al PRI.
Dicha coalición, con Eruviel Ávila como candidato, arrojó un resultado ganador contundente. La votación libre de la ciudadanía le dio la responsabilidad a esa coalición de avanzar en los intereses más altos de las y los mexiquenses.
En esta oportunidad electoral ya se ha firmado una coalición donde participan el Partido Nueva Alianza, el Partido Verde Ecologista, el Partido Revolucionario Institucional y se incorpora el Partido Encuentro Social. Vamos con una coalición fortalecida a competir ampliamente en el Estado de México.
Y celebro ampliamente lo que ha dicho el líder Emilio Gamboa, en cuanto a la participación activa, decidida, democrática y respetuosa de la ley, que senadoras y senadores de la República tendrán en este importante proceso electoral.
Permítanme hacer un reconocimiento a la trayectoria pública de nuestro precandidato que participa en el proceso interno cumpliendo las estipulaciones de la convocatoria, el diputado federal con licencia Alfredo del Mazo Maza, quien contará con el apoyo total del Comité Ejecutivo Nacional.
Y permítanme hacer un reconocimiento público a la destacadísima diputada federal Carolina Monroy, quien también participó en este proceso destacadamente.
Saludo con mucho cariño a mi compañera María Elena, en este encuentro en el que estamos aquí reunidos los legisladores del PRI.
Y también destaco la participación de nuestra compañera senadora con licencia, una talentosa Secretaria de Educación en el Estado de México y compañera priista destacada, Ana Lilia Herrera, quien también participó en este proceso.
El proceso en el Estado de México se está llevando a cabo con unidad y con inclusión, dos valores de política priista que son indispensables a nivel nacional para mantenernos como la principal alternativa política para las mayorías: unidad e inclusión.
En el estado de Coahuila se está llevando a cabo un proceso interno, se desarrolla conforme a lo que establece la legislación coahuilense y la convocatoria aprobada por el PRI.
También se ha conformado una coalición de participación amplia y quisiera reconocer la trayectoria política y la participación en ese proceso de nuestra compañera senadora Hilda Flores.
En Nayarit, se perfila la participación plena del senador Manuel Cota.
Mi reconocimiento como presidente nacional del PRI a la capacidad de trabajo, apertura y capacidad de convocatoria de mis compañeras senadoras Hilaria Domínguez y Margarita Flores, por su participación en la política nayarita.
Ya hemos tenido éxito con candidatos senadores en los estados de Sonora, Zacatecas e Hidalgo. Les pido ampliamente su participación y apoyo para respaldar puntualmente a los candidatos que surjan de los procesos internos, respetuosos de la ley, en los estados de Coahuila, Nayarit y el Estado de México.
Cada uno de ustedes tiene un espacio de responsabilidad y de oportunidad en estos importantes procesos para el país.
En el estado de Veracruz tenemos un reto muy importante, tendremos elecciones para los presidentes municipales y cabildos de ese importante estado de la República.
Quisiera hacer público reconocimiento a la altura de miras y talento político de los senadores José Yunes y Héctor Yunes, quienes de manera propositiva y constructiva han participado ampliamente en la política veracruzana, lo que ha permitido, también de manera armónica, que el día de ayer se hiciera una sustitución en la dirigencia del Comité Directivo Estatal en Veracruz, como lo establecen nuestros estatutos.
Muchas gracias Héctor, muchas gracias Pepe, por todo el respaldo que le dan al Comité Ejecutivo Nacional.
Permítanme un tercer tema: los mexicanos necesitan una transformación política plena y el PRI la va a ofrecer. Uno de los elementos que está en la agenda nacional es el reclamo de transformar la manera en que elegimos y componemos a nuestros órganos legislativos federales.
La propuesta del PRI –atendiendo una demanda ciudadana– es muy puntual: eliminar 100 diputaciones por la vía plurinominal y 32 espacios de senadores.
Distintos estudios de opinión muestran que la amplia mayoría de las mexicanas y de los mexicanos consideran que el sistema actual de plurinominales debe revisarse. La propuesta es inteligente y oportuna.
El recorte esperado en ahorro que se le daría a las finanzas públicas de ambas Cámaras, rebasa los dos mil millones de pesos, es un compromiso importante en un contexto que reclama la austeridad, la disciplina y las propuestas concretas de solución a la problemática nacional.
El PRI propone a todos los partidos políticos que esta propuesta se discuta y se apruebe antes de que termine el mes de mayo del 2017, precisamente para que pueda entrar en operación en las elecciones federales legislativas del verano del 2018.
Permítanme señalar que una iniciativa de esta magnitud política, así como los trabajos de diplomacia parlamentaria que deberá de llevar a cabo este grupo talentoso de mujeres y hombres en el Senado de la República, cuentan con un gran liderazgo.
Mi reconocimiento como dirigente nacional de nuestro partido a la trayectoria, sensibilidad y capacidad de convocatoria que tiene Emilio Gamboa Patrón, nuestro coordinador parlamentario en el Senado de la República.
Hacia adelante, el Partido Revolucionario Institucional en este trimestre convocará al inicio de los trabajos preparatorios para la XXII Asamblea Nacional de nuestro partido, que deberá de celebrarse en el mes de agosto, cumpliendo puntualmente con nuestros Documentos.
Básicos y la legislación electoral.
Continuaremos las reuniones de trabajo con las y los legisladores federales y locales, presidentes municipales y la clase política en su conjunto en los estados donde no somos gobierno, que reclaman una atención prioritaria.
En ese sentido, se han llevado a cabo ya 12 procesos de transformación estructural en 12 entidades federativas y también se han nombrado y faltan por nombrar 15 nuevos delegados del partido.
Eso ha incluido la participación –que agradezco– de senadores de la República que aquí nos acompañan y que ya se destacan por traer unidad y respetar la pluralidad política en las entidades federativas que encabezan.
Mucha gracias señores senadores.
Continuará el proceso de nombramiento de delegados y cambio de dirigencias. Como ustedes saben, hace seis meses cerca del 75 por ciento de nuestras estructuras estatales ya habían cumplido su etapa estatutaria y se requería su renovación. Para llevarla a cabo de acuerdo a nuestros estatutos, es fundamental el trabajo de los delegados generales del Comité Ejecutivo Nacional en dichas entidades.
Hacia adelante se iniciará el proceso de instalación de Comisiones Temáticas en el Consejo Político Nacional, serán cerca de 40, que involucrarán la participación de priistas en todo el territorio nacional. Para llevar a cabo este trabajo el priismo nacional cuenta con un extraordinario aliado, el senador Ernesto Gándara, del estado de Sonora.
Asimismo, iniciará la organización de los Foros Temáticos organizados por la Fundación Colosio, que tienen como propósito construir el programa, el plan, el proyecto, que defenderá nuestro partido en las elecciones del 2018.
Y como lo ha señalado el Presidente de la República, en el PRI primero el programa y después los nombres.
El trabajo para construir ese programa iniciará en este mes de febrero, a partir de la convocatoria que hará la Fundación Colosio.
En los estados donde no somos gobierno, en los estados donde somos oposición, ocupamos el mayor talento de ustedes.
Invito a una serie de reuniones por estado de la República donde participen las senadoras, los senadores, las diputadas y diputados federales, y los legisladores estatales, para definir ruta y estrategia para recuperar la confianza mayoritaria en aquellos espacios donde la hemos perdido.
Con visión crítica y autocrítica convocaremos a las mejores causas en esos espacios territoriales, para ganar las elecciones.
Compañeras y compañeros senadores:
La historia demanda lo mejor de nosotros. Tenemos dos grandes retos en nuestro país, a dos niveles completamente distintos. El primero, una amplia convocatoria de unidad nacional para enfrentar un reto internacional que significará un cambio muy importante para múltiples generaciones de mexicanas y de mexicanos.
Se convoca a la unidad a favor de México, para defender los mejores intereses de la patria. Aquí el equipo se llama México.
El segundo nivel de reto es el que tiene que ver con el desarrollo democrático de nuestro país. Éste es un importante año electoral.
Se tiene que competir con dignidad, se tiene que competir con propuesta y lo haremos de manera limpia y austera, para estar acorde con los tiempos que demandan los mexicanos.
Pero esa competencia electoral que es sana y necesaria para el desarrollo democrático, no debe significar un regateo en la necesidad de construir un gran Acuerdo Nacional, donde los intereses más altos del país se vean fortalecidos frente a la realidad de los retos internacionales que enfrentamos.
Por esa razón, les pido ampliamente su apoyo.
Les pido que redoblemos el paso.
Les pido que nos sumemos al gran trabajo que está haciendo el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto.
Y bajo el liderazgo de Emilio Gamboa y el apoyo de su partido, cada uno de ustedes cumpla, con patriotismo y distinción, el gran reto que tenemos enfrente a favor de México.