Todos los años, 275 millones de niños y niñas de todo el mundo sufren a causa de la violencia doméstica
Morelia Michoacán a 17 de febrero de 2020.-La violencia doméstica contra la infancia, es el primer peldaño de una sociedad rota, ya que ahí se desdibujan las perspectivas de un desarrollo de vida sano y pleno para nuestras niñas y niños, apuntó la diputada Lucila Martínez Manríquez, integrante de la LXXIV Legislatura del Congreso del Estado.
Hizo mención que todos los años, 275 millones de niños y niñas de todo el mundo sufren a causa de la violencia doméstica y padecen las consecuencias de una turbulenta vida familiar, según datos de la UNICEF.
Explicó que la violencia contra niños y niñas conlleva abuso físico y psicológico, abandono o negligencia, explotación y abuso sexual, en donde entre los perpetradores se encuentran principalmente los padres, madres y otros miembros de la familia.
Lucila Martínez Manríquez citó los datos de la Escuela Nacional de Trabajo Social de la UNAM que señala que en México, seis de cada diez niños reconocen haber sufrido algún método violento de disciplina, uno de cada dos ha sufrido presión psicológica por algún familiar, y uno de cada 15 ha recibido alguna forma severa de castigo.
“Como sociedad somos responsables de detectar las señales de violencia de un menor, actuar en consecuencia y denunciar, no quedarnos impasibles hacia un fenómeno que condiciona nuestro futuro como sociedad; esas señales pueden abarcar desde lesiones físicas como los golpes, quemaduras, arañazos, hasta cambios de comportamiento, como el apetito, la falta de sueño, la incontinencia, entre otros”.
La diputada quien preside la Comisión de Igualdad Sustantiva y de Género, agregó que la Unicef reporta una incidencia del 21 por ciento de violencia sexual en ambientes domésticos, en donde las niñas tienen muchas más posibilidades de ser víctimas de abusos que los niños.
“La situación de violencia contra nuestras niñas y niños es aún más dolorosa al ubicar la cantidad de homicidios, en promedio cuatro al día, lo que evidencia el grado de vulnerabilidad en que se encuentran en nuestro país”.
Por ello, Lucila Martínez Manríquez destacó la urgencia de políticas públicas efectivas por parte del Estado Mexicano para con sus niñas y niños, y una sociedad más actuante, no permanezca pasiva e indiferente frente a estos casos de violencia contra la infancia.