En lo que va del año, en el país se han registrado 651 incendios forestales, lo que representa alrededor de seis siniestros por día
Morelia Michoacán a 22 de abril de 2022.- El uso responsable del agua es un deber que tenemos todas y todos, máxime en temporadas en donde el requerimiento del vital líquido se hace mayor, recalcó la diputada Fanny Arreola Pichardo, coordinadora de la Representación Parlamentaria en la LXXV Legislatura del Congreso del Estado.
La diputada por el Distrito de Apatzingán recordó que debido a las altas temperaturas los niveles de almacenaje de agua decrecen, mientras que los incendios forestales se multiplican, por lo que todas y todos deben aportar su grano de arena para el cuidado del vital líquido.
“En lo que va del año, en el país se han registrado 651 incendios forestales, lo que representa alrededor de seis siniestros por día, situación que es muy preocupante si tomamos en cuenta la pérdida de superficie arbolada y especies que esto conlleva”.
La legisladora refirió que la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales reporta que en esta recta inicial del año en Michoacán se han registrado 37 incendios forestales, lo que supone que permanecerá la tendencia de años anteriores en donde los siniestros en la entidad superaron las seis centenas.
“Debemos asumir conciencia plena en el cuidado de nuestros recursos naturales, poniendo lo que esté a nuestra mano para prevenir este tipo de siniestros y para asumir a profundidad una cultura de cuidado del agua”.
Fanny Arreola recordó que en nuestro país se desperdicia entre el 30 y el 50 por ciento del agua potable en fugas, en donde también incide la omisión ciudadana en el cuidado y mantenimiento de las instalaciones al interior de los hogares.
En ese sentido, la legisladora apuntó que México está considerado como un país con baja disponibilidad de agua para sus habitantes, pese a contar con el 0.1% del total de agua dulce disponible a nivel mundial.
Debido a ello es que Fanny Arreola recalcó la importancia de un manejo responsable del vital líquido, y asumir cada quien desde su trinchera el cuidado de nuestros bosques, pues es una realidad el colapso ambiental que el mundo está atravesando.