Por: José Cruz Delgado
Morelia Michoacán a 27 de noviembre de 2018.-El gobernador Silvano Aureoles Conejo asumió una postura valiente al anunciar que dio por terminada la adhesión al Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica, con fecha del 18 de mayo de 1992 y el Convenio que en materia de educación se suscribió con fecha del 15 de diciembre de 2014.
No soy defensor de oficio de Silvano, pero quizá para algunos políticos fue una decisión precipitada, sobre todo para sus detractores, como Juan Manuel Macedo Negrete, dirigente de la Sección sindical DIII-6 del SNTE o de la CNTE porque la verdad ya no se sabe porque el oportunismo político está a todo lo que da y muchos se están arrojando a los brazos del “Mesías” Andrés Manuel López Obrador de acuerdo a sus intereses, quien se inconformó porque el gobierno de Michoacán dio por concluido el cuestionado acuerdo educativo.
Quizá los de la CNTE y SNTE sienten que sus “negocios” de cada año van a terminarse y lógicamente que perderán sus privilegios que anuales. Ahora tendrán que irse a cerrar calles, tomar edificios y cerrar carreteras a la Ciudad de México a ver si su amo López Obrador se los permite, pero son tan cínicos que al no tener motivos para hacer paros y plantones en Michoacán, van inventar pretextos para seguir obstaculizando la educación.
Así pues, el titular del Ejecutivo Estatal entregó de manera formal los servicios educativos de la entidad al Gobierno de la República, derivado de las diversas modificaciones al acuerdo original, tanto en la distribución de los recursos como en la operación de los mismos, que han generado un grave perjuicio a las finanzas públicas estatales, situación que le imposibilita continuar con los servicios a su cargo.
La verdad que tuvo buenas razones Aureoles Conejo para tomar esa difícil situación, una de ellas es que atraviesa por una crisis financiera y la verdad no podía cumplir con ese compromiso y ¿para qué endeudar más al estado?
Claro que eso no implica que renuncie a la responsabilidad que le toca
pero en un nuevo esquema de entendimiento, en un nuevo acuerdo; en una nueva relación Federación-Estado.
La CNTE exige año con año miles de millones de pesos en sus famosas “minutas” al gobierno estatal, es por ello que se les adeuda cada vez más y que según se dijo ascienden a más de 2 mil millones de pesos, persistiendo un déficit derivado de minutas firmadas por administraciones anteriores que ascienden a 4 mil 200 millones de pesos.
Algunos de los antecedentes presentados por el gobernador, muestran que en 1992 Michoacán aportaba con una concurrencia económica del 9.6 por ciento y la Federación un 90.4 por ciento, a través de la firma del Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica; para 2018 la participación estatal es de un 20.87 por ciento y un 79.13 por ciento federal, lo que representa un aumento sustancial.
Así pues con este antecedente era imposible seguir teniendo ese acuerdo que ha fenecido, además, de acuerdo a datos, otro factor que influyó en esa decisión es el aumento de la plantilla de trabajadores, ya que en 1996 el sistema educativo contaba con 9 mil 406 trabajadores estatales, 8 mil 499 docentes y 907 administrativos, con un costo de nómina de 394 millones de pesos; en 2014 la plantilla incrementó hasta 29 mil 625 trabajadores, 25 mil 291 docentes y 4 mil 368 administrativos, con un costo de nómina de 5 mil 213 millones de pesos, más un mil 668 millones de pesos en bonos.
Es decir, en 15 años creció el número de plazas en un 48 por ciento, sin el soporte económico requerido para el pago de bonos y salarios, por mencionar sólo algunos factores de la problemática.
La verdad tiene razón en haber tomado esa decisión, pues las organizaciones sindicales cada vez piden más y sus exigencias iban más allá de las posibilidades financieras del estado de Michoacán, mientras que la calidad de la educación cada día es peor debido a las suspensiones de clases y aunque el estado seguirá haciéndose cargo
de la educación media y superior, ahí también se enfrenta y se asume el resarcir grandes déficits en los diversos subsistemas, así como en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
Los de la CNTE están en todo su derecho de exigir sus pagos completos y oportunamente como lo señaló en un comunicado, pero sus derechos sindicales están garantizados aunque Silvano haya tomado esa decisión, y puedo asegurar que no fue una decisión precipitada, no, seguramente fue analizada minuciosamente de acuerdo a las posibilidades financieras del estado.
Y bueno, Norberto Antonio Martínez Soto, Presidente de la Comisión de Programación, Presupuesto y Cuenta Pública, del Congreso de Michoacán, señaló que esto representa un respiro para las finanzas públicas estatales, ya que en las últimas décadas se inició un proceso de regresión en el financiamiento del gasto a este sector y existe desconocimiento de diversos guiones presupuestales pactados.
“No es entregar la educación, al contrario, se trata de que el Gobierno Federal asuma sus responsabilidades financieras en la materia y con ello, se logre la ampliación de la cobertura de los servicios”.
El legislador local explicó que en Michoacán se han disminuido en términos reales los recursos económicos federales para la atención de la educación básica y normales, aunado a la doble negociación salarial; “se han generado graves desequilibrios en las finanzas públicas estatales que hacen imposible e inviable continuar con los compromisos asumidos”.
Tiene mucha razón, pero téngalo por seguro que los de MORENA van a reaccionar y a criticar la decisión valiente de Aureoles Conejo.
La educación enfrenta importantes rezagos derivado de decisiones que han privilegiado más una conveniencia política que la educación en sí misma, remarcó Luis Manuel Antúnez Oviedo, Delegado Nacional de Movimiento Ciudadano en Michoacán.
Se equivoca Manuel Antúnez Oviedo, delegado de Movimiento Ciudadano en Michoacán al decir que fue una determinación apresurada del gobernador, y eso de decir que podría derivar en conflictos sociales que afectaría la buena convivencia en el estado, hay que recordar que son los de la propia CNTE los que le han fallado a la educación, le han fallado a los niños y a Michoacán, son lo que han creado los conflictos sociales debido a sus ambiciones económicas y tienen en el penúltimo lugar al sector educativo.
Fue más congruente la diputada Adriana Hernández Íñiguez, al decir que siempre y cuando haya propuestas que sean en beneficio de Michoacán y los michoacanos, tendrían su respaldo como priísta y como michoacana al referirse al anuncio del gobierno del estado sobre devolver los servicios educativos a la federación, en ese sentido, Hernández Íñiguez recordó la problemática y el rezago que desde hace varios años mantiene la entidad en materia educativa.
“Los problemas todos los conocemos y, por supuesto, que si esta propuesta traerá un beneficio para el estado creo que hay que respaldar la decisión que se tome”, añadió la legisladora tricolor.
Asimismo, Hernández Íñiguez mencionó que dentro del paquete económico se observa el déficit en educación y mencionó que la calidad educativa del estado aún permanece en los niveles más bajos a nivel nacional.