Un análisis cauteloso de los datos de la Encuesta de Calidad e Impacto Gubernamental muestra una realidad preocupante.
Morelia, Michoacán; a 26 de mayo de 2020.- La recientemente presentada Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental realizada por el INEGI en noviembre del año pasado, muestra una realidad alarmante para la entidad y un verdadero reto para el gobierno estatal en materia de combate a la corrupción, así lo declaró la diputada local morenista, Cristina Portillo Ayala. “Michoacán vuelve a estar por encima de la media nacional en la percepción sobre la frecuencia de los actos de corrupción, ya que el 48 por ciento de los michoacanos considera que estos son muy frecuentes, mientras que a nivel nacional este dato es de 44 por ciento”, señaló la legisladora.
“Otro dato alarmante es que la confianza de los michoacanos hacia el gobierno estatal está en caída libre y se ubica en un 27 por ciento, muy por debajo del 40 por ciento que promedian todas las entidades federativas. Esto habla del deterioro que tiene el bono democrático del actual gobierno estatal frente a la opinión mayoritaria de la gente”, subrayó la diputada para quien esto es preocupante puesto que puede lastimar de fondo la relación entre sociedad e instituciones en Michoacán.
“Quisiéramos ver a un gobierno estatal preocupado en recomponer su relación con los ciudadanos, buscando canales de apertura y transparencia en su relación con otros poderes y con la sociedad en su conjunto; pero lo cierto es que la agenda del titular del ejecutivo parece que tiene como prioridad la de la promoción personalísima en una confrontación clara con el gobierno federal; situación que le aleja de una amplia mayoría de ciudadanos que sigue viendo en la corrupción uno de los principales problemas de Michoacán”, abundó.
Finalmente, la diputada dijo que los datos de esta encuesta a nivel nacional reflejan aún la inercia de corrupción que viene arrastrándose desde la administración peñanietista, a la que señaló como la más corrupta de la historia de México. “Nuestro gobierno de la república ha mostrado una voluntad férrea por combatir la corrupción y acabar con este flagelo. Hoy, como nunca antes en la historia del país, han caído peces gordos y son ejemplo de que la impunidad se detendrá y que ha dejado de haber intocables. Pronto la percepción sobre la corrupción ira cambiando conforme nuestro gobierno se asiente en sus tareas”, concluyó.