Michoacán Informativo

Nueva reserva natural en Michoacán incorporaría más de 14 mil hectáreas

Las propias comunidades se están organizado para lograr la protección que incluiría bosques de ejidos y comunidades de Villa Madero, Tacámbaro, Acuitzio, Morelia y Tacámbaro. 

San Pedro, Piedras Gordas, municipio de Villa Madero, Michoacán, a 29 de abril de 3017.- Defendamos nuestra vida: los bosques y el agua. Es la consigna que logró reunir a ejidatarios, autoridades locales y del Gobierno del Estado para declarar como Área de Preservación Ambiental los bosques de este ejido, y que sean preservados como una microcuenca dónde se garantice la cosecha de agua.

Esta fue la petición que hicieron al titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático (SEMARNACC), Ricardo Luna García, quién les ofreció toda la atención que necesiten para lograr conservar los bosques de la que ya denominaron Área Natural Protegida San Pedro.

Todo el apoyo para las comunidades como ustedes, que preocupados por el medio ambiente y desprendiéndose de la ambición prefieren conservar sus bosques, quien preserva el medio ambiente lo menos que puede recibir de nosotros los funcionarios, es total respaldo para lograr estos objetivos”, comprometió el titular de la SEMARNACC durante un ameno evento que organizó la comunidad para celebrar esta acción a favor de la naturaleza.

A esta determinación llegaron Alertados por la situación de devastación que se está viviendo en bosques michoacanos, las comunidades, representantes de localidad y comisariados ejidales, pidieron el respaldo del Ayuntamiento Municipal, para buscar a las autoridades ambientales estatales y pedirles que sus bosques se declaren como área protegida antes de que sea demasiado tarde.

Esta organización ha sido posible gracias a la participación de muchas personas, la gran colaboración y disposición del alcalde de Villa Madero, Jorge Ortega Ávila, quien es de los principales interesados en lograr la protección de esta reserva. Uno de los más activos impulsores de esta reserva el periodista Julio Santollo, que junto a su esposa han dado puntual seguimiento a la organización de los ejidos y comunidades interesadas en preservar el medio ambiente.

San Pedro Piedras Gordas se localiza al sur poniente de Villa Madero, casi en los límites con Tacámbaro; en esta región comienza a registrarse una gran devastación de bosques que han sido talados  o incendiados con el propósito de instalar huertas de aguacate.

Entre los pobladores hay preocupación porque comienza a haber estragos por escases de agua para el consumo humano y la ganadería, pero también hay esperanza y hay ganas de trabajar para sostener el equilibrio ecológico regional.

Para lograr esta preservación están convocando a las comunidades aledañas, desde Acuitzio, Morelia, Tacámbaro y el propio municipio de Villa Madero, para que se unan a constituir una reserva de una microcuenca regional. Como punto de arranque se anunció la disposición de 200 hectáreas como reserva, pero en este evento otras comunidades decidieron sumarse, y se tiene estimado que se logrará una reserva que oscila entre 14 mil y 16 mil hectáreas de bosque.

A partir de este lunes comenzarán a realizarse mesas técnicas y de orientación a las comunidades y ejidos interesados, para determinar cuál sería la superficie total que se pueda destinar a una reserva natural con un manejo de sustentabilidad.

Esta inquietud que salió de las propias comunidades fue motivo de fiesta, hay alegría y esperanza, con este acercamiento se consolidó un trabajo conjunto entre las comunidades, autoridades municipales y estatales para lograr la conservación que tanto les preocupa.

Esta reserva incluye una antigua hidroeléctrica propiedad de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que se localiza terrenos debajo de la comunidad de San Pedro Piedras Gordas, pero la misma presa se ha visto afectada por la tala de bosques y cambio de uso de suelo que se está generando alrededor, está perdiendo capacidad de almacenamiento, sus aguas están azolvadas y cada día es menos la fauna silvestre que se resguarda en torno a ella, motivo por el que las misma gente, principalmente señoras de la tercera edad, pidieron que en el decreto de protección se incluya un proyecto para restaurar este vaso de agua y dignifique la vida de los lugareños, lo que a la vez ayudará a regular el ambiente natural para el bienestar de los animales silvestres.

Te recomendamos leer