Por Roberto Carlos Guevara
Tarimbaro Michoacán a 29 de agosto de 2024.- A tan solo dos días de concluir su administración, el presidente municipal de Tarímbaro, Bladimir González, y el director del Comité de Agua Potable y Alcantarillado de Tarímbaro (COMAPAT), Felipe Ruiz, se encuentran en el centro de una fuerte controversia. Los ciudadanos han alzado la voz en contra de la aparente indiferencia de ambos funcionarios, acusándolos de priorizar los intereses de desarrolladores inmobiliarios sobre las necesidades básicas de la población.
Residentes de Tarímbaro han denunciado que el suministro de agua en sus comunidades ha sido drásticamente reducido en las últimas semanas. Según testimonios, esta disminución en el abastecimiento no es casualidad; se sospecha que el agua destinada a las zonas habitacionales ya establecidas está siendo desviada para alimentar a nuevos fraccionamientos que aún no han sido municipalizados. Estas acusaciones toman fuerza tras las observaciones de algunos ciudadanos que han notado la apertura de obras en los alrededores de estos desarrollos, dando la impresión de que se están realizando conexiones clandestinas para extraer agua del pozo comunitario.
Uno de los vecinos afectados relató su experiencia al caminar por la parte posterior de un fraccionamiento en construcción: “Vi que abrieron y me da la impresión que es para tomar agua del pozo. Ahorita andan ahí trabajando; me acerqué a preguntar y me dijeron que solo estaban haciendo reparaciones. Pero creo que nos están reduciendo el agua a nosotros para abastecer al nuevo fraccionamiento que está ahí. Según ellos, tienen pozo propio y apenas están construyendo el tanque elevado. Piensan que somos ignorantes, ¡yo creo!”
Estas declaraciones han alimentado la frustración y el descontento entre la población, que considera que la administración municipal está actuando en complicidad con los desarrolladores, sacrificando el bienestar de las comunidades existentes. Además, las risas y emojis incluidos en los testimonios subrayan un sentimiento de indignación mezclado con incredulidad, como si las autoridades locales estuvieran subestimando la inteligencia de los ciudadanos.
El manejo del agua, un recurso vital y escaso, ha sido motivo de creciente preocupación en Tarímbaro. La aparente falta de transparencia y responsabilidad por parte de Bladimir González y Felipe Ruiz no solo erosiona la confianza en la administración saliente, sino que también pone en riesgo la sustentabilidad de los recursos hídricos de la región.
Con el cambio de administración a la vuelta de la esquina, la ciudadanía exige respuestas y acciones concretas. La gestión del agua y la equidad en su distribución se han convertido en temas urgentes que la nueva administración no puede ignorar. Mientras tanto, la sombra de la negligencia y el favoritismo parece empañar los últimos días del mandato de Bladimir González, dejando un legado de controversia y descontento en Tarímbaro.