Por Roberto Carlos Guevara
Morelia Michoacán a 17 de diciembre de 2024.- El diputado del Partido del Trabajo (PT), Hugo Rangel, se ha unido a la lucha por reformar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), buscando eliminar las desventajas que afectan a los productores de bebidas artesanales como el mezcal. Esta problemática ha sido señalada como un obstáculo para los pequeños productores, mientras las grandes compañías cerveceras se ven beneficiadas por el actual esquema fiscal.
El legislador destacó que el 95% del mercado de bebidas alcohólicas está controlado por corporaciones que aportan apenas el 66% del total recaudado por este impuesto, dejando una carga desproporcionada sobre los productores artesanales. Ante esta situación, Rangel ha propuesto alternativas que podrían equilibrar el panorama y beneficiar tanto a productores como a consumidores.
Propuesta para un cobro equitativo
La iniciativa planteada busca modificar el esquema de cobro del IEPS. En lugar de basarse en el valor comercial de las bebidas alcohólicas, la propuesta sugiere una tarifa fija por grado alcohólico por litro, un modelo utilizado en otros países y avalado por organismos como la OCDE.
“Esto beneficiaría a los productores al reducir la carga fiscal, y a los consumidores, quienes podrán acceder a productos artesanales de mayor calidad a un precio más justo”, explicó Hugo Rangel. Además, señaló que el sistema actual encarece desproporcionadamente las bebidas de alta graduación alcohólica, perjudicando su competitividad frente a las cervezas industriales, de menor calidad y con mayor penetración de mercado.
Un frente unido por el mezcal y las tradiciones
El proyecto no se limita al ámbito federal. Congresos locales de estados clave en la producción de bebidas artesanales, como Oaxaca, Puebla, Guerrero y Baja California, han mostrado su respaldo. Rangel destacó que se está conformando un frente legislativo en colaboración con diputados locales, quienes presentarán iniciativas para reforzar la reforma desde sus congresos.
“Queremos hacerle justicia al mezcal, no solo por su impacto económico, sino también porque representa nuestras tradiciones y cultura. Hemos encontrado apoyo en legisladores de regiones productoras, quienes entienden la importancia de proteger estas industrias locales”, señaló el diputado.
Beneficios para productores y consumidores
De aprobarse esta reforma, los productores de mezcal, vino y otras bebidas artesanales tendrían un escenario más favorable, con menos presiones fiscales que obstaculicen su crecimiento. Asimismo, los consumidores podrían acceder a productos de mejor calidad a precios más competitivos.
“El mezcal no es solo una bebida, es una tradición que une a las comunidades. Este cambio garantizaría su preservación y fortalecería las economías locales”, concluyó Hugo Rangel.
El Congreso de la Unión será ahora el escenario clave para definir el futuro de esta iniciativa, en la que se busca garantizar justicia fiscal para las bebidas artesanales, mientras se protege un patrimonio cultural que enriquece al país.