Por Roberto Carlos Guevara
Morelia Michoacán a 10 de octubre de 2020.-Mientras existan instituciones y sistemas jurídicos que respalden una explotación no sostenible, por encima de un aprovechamiento racional, en Michoacán el deterioro ambiental seguirá creciendo, aseveró el diputado del Partido del Trabajo (PT), Baltazar Gaona García.
Destacó que Michoacán cuenta con una abundante diversidad biológica en especies, ecosistemas y hábitats, pero el acelerado crecimiento poblacional genera un alto impacto ambiental y a eso se suma que las instituciones y sistemas jurídicos que respaldan una explotación no sostenible, por encima de un aprovechamiento racional, provoca un deterioro al medio ambiente e incrementa la perdida de diversidad biológica.
La generación de residuos, la falta de recurso para su recolección y disposición final de forma inadecuada, las descargas de aguas residuales sin tratamiento a los cuerpos de agua, las emisiones a la atmosfera sin la regulación adecuada incrementan las estadísticas, colocando a Michoacán en una situación de riesgo ambiental preocupante lo que impide un desarrollo sostenible.
Gaona García indicó que el Congreso local es responsable de coadyuvar con el Poder Ejecutivo y los municipios para el desarrollo sostenible de Michoacán, y tiene como desafío inicial hacer que el gobierno cumpla y haga cumplir la legislación ambiental vigente e impulsar el desarrollo en coordinación con los ayuntamientos.
Sostuvo que es momento de que los 112 ayuntamientos, y el Consejo Mayor de Cherán, realicen acciones en infraestructura para que se cuente con un desarrollo sostenible que permita mejorar las condiciones de vida de los habitantes del estado, ya que el desarrollo sostenible promueve la prosperidad, así como oportunidades económicas y un mayor bienestar social.
Aseveró que no se puede hablar de prosperidad integral en Michoacán mientras sea contrastante la realidad que hay entre los municipios.
Gaona García puntualizó que tanto los presidentes municipales como el Consejo Mayor de Cherán deben participar y encaminarse a nuevas tecnologías como el cambio de luminarias, la instalación de plantas tratadoras de aguas residuales, el manejo de residuos sólidos y no tener tiraderos a cielo abierto.
La aplicación de estas acciones, prosiguió, para el mejoramiento del medio ambiente son indispensables en todos los municipios, pues se traducen en beneficios para el medio ambiente, pero también para los ciudadanos, ya que tendrían mejores servicios municipales y además contribuye en mucho a una mejor calidad de vida y, por supuesto, de salud.
Indicó que los servicios municipales que prestan los ayuntamientos a los ciudadanos son indispensables y son multifactoriales los desafíos a los que se enfrentan los alcaldes para brindarlos y aún más complicado que se invierta en servicios amigables con el medio ambiente, es por ello que propuso la iniciativa de reforma al artículo 35 Bis de la Ley de Coordinación Fiscal del Estado de Michoacán.
Tras expresar lo anterior en el marco de la presentación de su Segundo Informe de labores, Gaona García especificó que la iniciativa que presentó para modificar la Ley de Coordinación Fiscal, tiene como finalidad que del monto que le corresponde a cada uno de los municipios, derivado del Fondo de Aportaciones Estatales para la Infraestructura de los Servicios Públicos Municipales, un 35% (treinta y cinco) por ciento de esa cantidad sea destinada única y exclusivamente para la adquisición de nuevas tecnologías que tengan como finalidad la recuperación, conservación y mejoramiento del medio ambiente.
Asimismo, y en el mismo sentido de protección al medio ambiente, va el exhorto que hizo a los presidentes Municipales y al Consejo Mayor de Cherán, para que Implementen el cambio de luminarias en el alumbrado público.
Expresó que nadie desconoce que el Derecho de Alumbrado Público (DAP), es una contribución a cargo de los particulares y a favor del municipio para cubrir el pago de alumbrado público.
Gaona García comentó que el mundo prospera de los frutos del crecimiento económico global, pero al mismo tiempo se teme por la degradación ambiental masiva.
Y es que la actividad humana, dijo, ha conducido a peligros reales como el cambio climático, la desertificación, el estrés hídrico y la degradación de los ecosistemas, “con lo que nos acercamos al punto de inflexión, es decir a nuestros “límites planetarios” que, una vez rebasados generará cambios ambientales irreversibles y abruptos”.
No se puede apoyar, agregó, un modelo de desarrollo que agota los recursos naturales y destruye el ambiente con el que coexistimos y del que dependemos para sobrevivir.
Por lo tanto, no llegaremos muy lejos con un desarrollo desequilibrado que desproporcionadamente beneficia a los pocos ricos y deja atrás a los muchos pobres extremos.