La LXXIV Legislatura Local aprobó decreto para que cada 5 de junio se realice esta campaña en la entidad
La propuesta fue presentada por los diputados de la Comisión de Desarrollo Sustentable y Medio Ambiente
A mantener vigente el legado que heredó el ingeniero convocó Lucila Martínez
Morelia Michoacán a 9 de julio de 2020.-Con el objetivo de impulsar acciones que contribuyan a la restauración de los bosques y preservación de los recursos naturales en Michoacán, y continuar con el legado del ingeniero Pascual Sigala Páez, los diputados integrantes de la Comisión de Desarrollo Sustentable y Medio Ambiente en el Congreso del Estado, en voz de la diputada Lucila Martínez Manríquez, propusieron que se instituya en Michoacán la campaña “Un Árbol por la Vida”, y se realice cada 5 de junio, en el marco de la conmemoración del Día Mundial del Medio Ambiente, punto de acuerdo que fue aprobado por la LXXIV Legislatura Local.
Los diputados Lucila Martínez Manríquez, Norberto Antonio Martínez Soto y Mayela del Carmen Salas, proponentes de la propuesta, coincidieron que es fundamental que en los 113 municipios se realicen acciones coordinadas en pro de nuestros recursos naturales, lo cual fue avalado por los integrantes del Congreso del Estado.
Será la Comisión de Desarrollo Sustentable y Medio Ambiente del Congreso del Estado, en conjunto con la Secretaría de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial y la Comisión Forestal del Estado de Michoacán los responsables de organizar las acciones para llevar a cabo esta campaña. Además, que el Poder Legislativo por conducto de la comisión referida, hará la invitación a todos los municipios del estado para que se sumen a la misma.
Lucila Martínez destacó que es importante realizar acciones tendientes a conservar los ecosistemas, que constituyen el equilibrio perfecto para generar barreras biológicas que no permiten el surgimiento de nuevos patógenos y su dispersión exponencial entre los humanos y uno de los ecosistemas más importantes en nuestro planeta, sin lugar a duda es el bosque.
Hoy más que nunca, dijo, es apremiante sumar esfuerzos para paliar los efectos que ha generado el cambio climático. Tan sólo en México del año 2008 al 2018 se incrementaron en un 1,214% los reportes de contingencias en los recursos naturales, refiriéndose a las situaciones de riesgo derivadas de actividades humanas que ponen en peligro la integridad de uno o varios ecosistemas, sumando entre 2015 y 2018, 609 casos de acuerdo con cifras del INEGI 2019.
Si bien, Michoacán ocupa el quinto lugar a nivel nacional en riqueza ambiental, ya que cuenta con 6 millones de hectáreas en áreas verdes, un millón en bosques templados y un millón en selvas, de las cuales el 80 % del área forestal ha sido afectada, principalmente, por el cambio de uso de suelo y por la tala clandestina.
Recordó que, con el objetivo de aportar a la recuperación de los bosques, en vida el ingeniero Pascual Sigala Páez, desde el 2003 implementó en Michoacán la campaña denominada “Un Árbol por la Vida”, la cual desde sus inicios ha contribuido a la reforestación de cientos de hectáreas que han beneficiado a un sin número de habitantes tanto del ámbito urbano como rural.
“Un Árbol por la Vida” no debe verse como un programa o proyecto político, se debe ver como el sueño de un hombre comprometido con sus ideales y con el beneficio social, más que un árbol sembró valores, principios y un gran sentido de la responsabilidad ambiental entre la sociedad”.
Lucila Martínez resaltó que sobre la memoria del ingeniero Sigala descansa el haber inculcado el cuidado del medio ambiente, así como la enseñanza a las nuevas generaciones a valorar la naturaleza y ser más responsables a la hora de beneficiarse de ella.
“Sabedor que el canto de las aves es imposible sin la presencia de los árboles; que sin árboles no hay lluvia; que sin árboles no hay futuro; y, que sin árboles no hay vida, el ingeniero Pascual Sigala Páez, fue el creador e impulsor del programa “Un Árbol por la Vida”, idea que ha traído grandes beneficios a Michoacán, porque no sólo representa la plantación de miles de árboles, sino también significa la semilla que dejó en muchas generaciones de niñas y niños que, acompañados de sus padres, vivieron la experiencia enriquecedora de sembrar un árbol”.
Por lo anterior se convocó a no dejar morir el legado que heredó el ingeniero Pascual Sigala, y que mediante decreto legislativo se establezca la continuidad de esta actividad que más allá de filias o fobias, se vea como un proyecto por la humanidad, por lo que los diputados de LXXIV Legislatura Local avalaron por unanimidad la propuesta para que cada 5 de junio se lleve a cabo esta campaña en memoria del ingeniero Pascual Sigala y en pro del cuidado y protección de nuestros recursos naturales.