En el 2012, cuando tenía 16 años, César Ignacio N. P., desapareció de su hogar, en Zamora. Desde entonces, el peregrinar de sus padres parecía interminable, por todos los lugares posibles, vecinos, instituciones privadas, colectivos, dependencias e iglesias. Hoy, después de 8 años, el joven se ha reencontrado con su familia.
En un hecho que llenó de esperanza y alegría a las personas cercanas al joven, la Secretaría de Gobierno, a través de la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas, logró la localización, ubicación, rescate y entrega de César Ignacio a sus familiares.
César, hoy 24 años de edad, quien padece esquizofrenia, se extravió y por azares del destino llegó hasta Hermosillo, Sonora, lugar en donde deambuló, vivió y pernoctó a las afueras de una Farmacia, ya se encuentra en el trayecto de regreso a Zamora.
Marco Antonio Hernández Zaragoza, titular de la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas, ponderó la estrecha coordinación con otras instituciones y colectivos, para obtener la información que los llevó al joven, “supimos entonces que se encontraba en Sonora, constatamos que fuera él y realmente es un caso extraordinario”.
De inmediato, las autoridades del Gobierno que encabeza Silvano Aureoles Conejo, se pusieron en contacto con su familia “y fuimos por él, dialogamos con él y somos participes de este gran suceso”, expresó.
Señaló que, por instrucciones del secretario de Gobierno, Carlos Herrera Tello, y en apego a la premisa de la administración estatal, de ser facilitadores para encontrar a las personas desaparecidas, se pudieron solventar todos los gastos para reunir al joven con su familia.
“Se contribuyó desde la ubicación de la persona, su rescate y entrega a los familiares como marcan los protocolos, solventamos todos los gastos para que esto ocurriera y estamos comprometidos a seguir adelante y redoblar esfuerzos”, expresó.
Hernández Zaragoza, afirmó que este es un ejemplo de cómo el trabajo interinstitucional, así como con organizaciones de la sociedad civil, rinde frutos.
“Tenemos la esperanza de encontrar a más personas desaparecidas, no es una labor fácil, pero picando piedra se puede lograr. Para encontrar a más personas debe existir una total coordinación entre las distintas autoridades”, concluyó.