Recalcó que la ausencia de bienestar convive con el cinismo y la mediocridad de élites políticas y económicas que viven con excesos que van mucho más allá de las posibilidades de la mayoría de la sociedad
Morelia Michoacán a 9 de enero de 2024.- La banalidad y los excesos deben desterrarse del ejercicio de la tarea pública, por lo que quienes desarrollan una encomienda pública deben atender el interés superior de las y los ciudadanos y estar en todo momento sujetos al escrutinio público, recalcó el diputado Víctor Manríquez González, integrante del Grupo Parlamentario de Movimiento Ciudadano en la LXXV Legislatura del Congreso del Estado.
El legislador naranja recalcó que la ausencia de bienestar convive con el cinismo y la mediocridad de élites políticas y económicas que viven con excesos que van mucho más allá de las posibilidades de la mayoría de la sociedad.
“Lamentablemente encontramos que esos excesos son publicitados con absoluta banalidad y ha sido el caldo de cultivo para que se indigne y, en muchos casos, se movilice toda una generación inspirada por premisas de intransigencia moral y exigencias de moderación política”.
“Desde la ola naranja comprendemos el carácter del desafío que tenemos enfrente: reivindicar el derecho a la dignidad y a vivir en un Estado de bienestar que respete las diferencias de las personas jóvenes”.
Víctor Manríquez puntualizó que, con un enfoque de transversalidad, el objetivo debe ser el empoderamiento de las personas jóvenes del país y el estado para permitir que las expresiones de indignación se traduzcan en derechos y cambios profundos de la vida institucional.
“No nos cabe la menor duda en vez de asumir los costos de una generación a la que se ha condenado a la precariedad, debemos asumir las decisiones necesarias e implementar soluciones integrales que sean construidas con legitimidad democrática; es decir, con la participación de las personas jóvenes”.